Lectura Bíblica:Nehemías 9:32-38
La petición y
apelación conmovedora:
Han pasado revista de
la historia del trato divino con ellos desde el llamamiento de Abraham; ahora
presentan su petición. Han hecho una confesión completa y todos han quedado
complicados en el mal. “Tu, oh Señor
tienes toda razón y nosotros somos malos” (V. 33). Trazan toda su maldad a
una fuente; desobediencia a la palabra de Dios y el resultado: “Henos aquí… estamos en grande angustia”.
Todo el tiempo han tenido tres grandes características divinas delante de
ellos. Majestad: Dios grande, fuerte
y temible. Fidelidad: que guardas el
pacto. Compasión: (V. 31). Todo ha
sido escrito para nuestra amonestación y es como una gran parábola para
nosotros.
La desobediencia
traerá fracaso: EL creyente que sigue en
pecado será siempre débil y sin poder delante del enemigo. “He aquí la bondad y la severidad de Dios” (Ro. 11:22). Su bondad
está escrita con mayúsculas a través de todo el capitulo, está lleno de ella.
La severidad. La rebelión trajo su recompensa. ¡Qué contraste entre el v. 24 y
el 30! Victoria y derrota. ¿Cuál será para mí? Su pecado Había sido presuntuoso
y provocativo. Es algo terrible pecar con el pensamiento en el corazón que Dios
es misericordioso y que perdonará. Es
ultrajar la gracia. ¡Oh la maravillosa longanimidad y paciencia del Señor!
Ellos habían sufrido por su pecados; se habían arrepentidos sufrido por sus
pecados; se habían arrepentidos e hicieron un pacto con Dios que fue
arrepentido e hicieron un pacto con Dios que fue la manera que estos hijos del
cautiverio derramaron sus angustias delante de Dios. Justificaron a Dios en su
trato con ellos y magnificaron su gracias. Es la posición que nos convendría
tomar. Se echaron sobre su misericordia, no tenía derecho alguno. ¡Ojala que
hubieran quedado allí!
Walter T. Bevan
Meditaciones Revista Devocional (Edición 1983)