Comentario PROVERBIOS capítulo 1



Versículos 1-6.El uso de los Proverbios. 7-9.Exhortaciones a temer a Dios y obedecer a los padres. 10-19. Evitar las seducciones de los pecadores. 20-33. El discurso de la Sabiduría a los pecadores.
Vv. 1-6. Las lecciones aquí dadas son simples y probablemente beneficien a los que sienten su propia ignorancia y la necesidad de que les enseñen. Si los jóvenes atendieran sus caminos conforme a los Proverbios de Salomón, ganarían conocimiento y discreción. —Salomón habla de los puntos más importantes de la verdad y aquí hay uno mayor que Salomón. Cristo habla por su palabra y por su Espíritu. Cristo es la Palabra y la Sabiduría de Dios, y nos es hecho sabiduría.
Vv. 7—9. Necias son las personas que no tienen sabiduría verdadera y siguen sus propios artilugios, sin considerar la razón ni la reverencia para con Dios. —Los niños son criaturas razonables, y cuando les decimos lo que deben hacer, debemos decirles por qué. Pero son corruptos y voluntariosos, por tanto con la instrucción se necesita una ley. Que las verdades y mandamientos divinos sean para nosotros altamente honorables; valorémoslos y entonces lo serán para nosotros.
Vv. 10—19. La gente mala ejerce celo para seducir a los demás llevándolos a las sendas del destructor; los pecadores aman la compañía para pecar. Pero tienen tanto más por qué responder ¡Cuán cautelosa debe ser la gente joven! 4; 32 “No consientas”. No digas como ellos dicen, ni hagas como ellos hacen o quisieran que hicieras; no tengas comunión con ellos. —¡Quién podría pensar que es un placer para un hombre destruir a otro! Nótese que su idea de riqueza mundana que no es ni de peso ni preciosa. Es el error destructor de miles que sobrevaloran la riqueza de este mundo.
Los hombres se prometen en vano que el pecado resultará ventajoso para ellos. —El camino del pecado es cuesta abajo; los hombres no pueden detenerse a sí mismos. Que la gente joven quisiera rehusar la ruina temporal y la eterna; que ellos rehusen dar un paso en las sendas destructoras. La avaricia que los hombres tienen por ganar los apresura a cosas que no tolerarán que ellos ni otros vivan la mitad de sus vidas. ¿Qué le aprovecha al hombre si gana el mundo y pierde su vida? Mucho menos si pierde su alma?
Vv. 20—33. Salomón declara aquí cuán peligroso es no escuchar los llamados de Dios, habiendo mostrado cuán peligroso es escuchar las tentaciones de Satanás. Cristo mismo es Sabiduría. Tres clases de personas son aquí llamadas por Él: —1. Los simples. Los pecadores que quieren sus simples nociones del bien y del mal, sus simples prejuicios contra los caminos de Dios y se halagan en la maldad. —2. Los burladores. Gente orgullosa y jovial que hace chistes de todo. Los burladores de la religión que rebajan toda cosa sagrada y seria. —3. Los necios. Los necios peores son los que odian a quienes les enseñan, y que tienen un disgusto bien arraigado contra la verdadera piedad. —El precepto es simple: Vuélvete ante mi reproche. No usamos bien los reproches si no nos devolvemos del mal a lo que es bueno. Las promesas son muy alentadoras. Los hombres no pueden devolverse por ningún poder propio, pero Dios responde: He aquí, Yo derramaré mi Espíritu en ti. Se necesita gracia especial para la conversión sincera. Pero esa gracia nunca será negada a quien la busque. —El amor de Cristo y las promesas mezcladas con sus reprensiones seguramente captan la atención de todos. Bien se puede preguntar: ¿cuánto tiempo piensan los hombres seguir por ese camino tan peligroso cuando se toman en cuenta las incertidumbres de la vida y las consecuencias de morir sin Cristo? Ahora los pecadores viven cómodos y desafían la pena, pero su calamidad llegará. Ahora Dios está dispuesto a oír sus oraciones, pero entonces ellos clamarán en vano. ¿Todavía despreciamos la sabiduría? Oigamos con diligencia y obedezcamos al Señor Jesús, para que disfrutemos de paz de conciencia y confianza en Dios; seamos libres del mal en la vida, en la muerte y para siempre.

Comentario Bíblico: Matthew Henry